La impresionante estructura provisional que se ha levantado cerca del Coliseo, concretamente en la Piazza Celimontana, ya destaca como uno de los principales referentes visuales y simbólicos del Jubileo de las Cofradías. La carpa, instalada con gran rapidez y eficiencia, servirá como punto de partida y llegada para el Cachorro y la Esperanza de Málaga en su participación histórica en la Gran Procesión Jubilar que se celebrará en Roma.
Al igual que sucede en las grandes basílicas romanas, donde atravesar la puerta santa representa un acto de conversión y reconciliación con Dios, esta carpa adquiere un profundo significado teológico. Se convierte en el marco simbólico que acoge el comienzo y el final del recorrido de una imagen sevillana que representa la fe y el sentir de toda una ciudad. Pensada como una representación de la puerta santa, esta estructura refleja el sentido más hondo del Año Jubilar: ser un signo tangible de apertura a la gracia divina, la conversión del corazón y el reencuentro con Dios. En los jubileos, las puertas santas de las principales basílicas romanas se abren de forma extraordinaria, y cruzarlas es entendido como un nuevo inicio en la vida de fe. Esa misma idea es la que se ha querido transmitir con estas carpas: hacer presente el simbolismo jubilar de la puerta santa.
La instalación fue completada en tiempo récord, gracias a una estrecha colaboración entre las autoridades de Roma y el equipo organizador, que ha velado por preservar el entorno histórico. La llegada del Cristo a este enclave tan significativo se perfila como un momento de gran intensidad emocional y simbólica, en el que se unirán la devoción de Sevilla, el lenguaje universal del arte sacro y el mensaje espiritual del Jubileo.